Esta semana es una hermosa oportunidad para reflexionar sobre la alta importancia de Dios en nuestras vidas, no como un motivo de satisfacción y vivencia religiosa, sino como un estilo de vida, en el que se experimenten la presencia del Señor en nuestros corazones, reconociéndole en todo tiempo que somos hechos a su imagen y semejanza, que por su sangre derramada somos hoy quienes somos, y sobre todo la bendita misericordia a favor de nosotros para que con Fe, Esperanza, y Comunión Santa alcancemos todas y cada una de sus Promesas.
Sólo con Cristo lograremos inmensas bendiciones, y la Salvación de nuestras almas, es un hermoso camino de sacrificio, esperanza y compromiso con el Rey de Reyes para que redimidos por su bendita sangre, alcancemos gloriosos tiempos de sobreabundancia no de cosas materiales que es parte natural de este mundo sino sobre todo de la transformación personal e interior, la reafirmación necesaria y la convicción que con Él somos todo con su Poder Divino.
Honra al Padre en todo momento y vive gloriosamente en comunión íntima con su Santo Espíritu.
¡Felices Pascuas de Resurrección!!
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